Día a día vemos que la oferta programática de la televisión nacional tiene poca o nula oferta para nuestros niños. Ejemplo de ello es un estudio del Consejo Nacional de Televisión (CNTV) del 2015, que muestra que existen productos poco atractivos y cómo los pequeños han empezado a preferir otros programas, como las teleseries. Justamente, este es uno de los temas que la Presidenta Michelle Bachelet busca abordar con la firma de la indicación sustitutiva al proyecto de ley que modifica la Ley de Televisión Nacional de Chile (TVN) y que crea un Canal Cultural Educativo, de libre recepción y sin publicidad, en la estación pública.
Esta determinación busca reforzar la misión pública que tiene Televisión Nacional, como canal estatal y como una empresa al servicio de todos los chilenos. A esto se suma que la nueva señal educativa contribuirá a diversificar los contenidos culturales de nuestra industria audiovisual, pero también ayudará a muchos niños que no tienen la posibilidad de acceder a contenidos educativos e infantiles de calidad.
En este contexto, el proyecto de TVN permitirá inyectar recursos para que pueda cumplir con los compromisos que le impone la Ley de Televisión Digital Terrestre para que pueda poner en marcha el Canal Cultural Educativo, pero también modernizará su estructura y su gobierno corporativo, elevando los requisitos y el perfil de los integrantes de su directorio. Además, la iniciativa establece un Consejo Consultivo, integrado por miembros de la sociedad civil que van a fiscalizar y colaborar con Televisión Nacional en el cumplimiento de su misión.
Todas las democracias sólidas cuentan con televisiones públicas potentes, autónomas, independientes, que entreguen educación y valores a nuestros niños y esos son principios que queremos rescatar. Necesitamos reafirmar el rol público de TVN y con estas propuestas pretendemos que el canal de todos los chilenos pueda competir en un plano de igualdad e independencia, en el mercado televisivo.
X